La historia del arte, del pensamiento, de la ciencia, nos ha sido a menudo contada como fruto del genio de algunos individuos excepcionales, siempre de género masculino. Semejante visión deja en la sombra a las mujeres que no solo han acompañado, ayudado e inspirado a esos hombres, las ‘musas’, sino que con frecuencia han sido creadoras a su vez. ¿Por qué ellas ocupan siempre un segundo plano?
Las biografías de algunas célebres parejas de artistas o intelectuales, de distintas disciplinas, servirán para reflexionar en este ciclo sobre algunas cuestiones de gran alcance, y en absoluto resueltas, en torno a la creación, la historia y la desigualdad de género.
➡️ La pareja protagonista del miércoles 6 de febrero será la de Gabrielle ‘Coco’ Chanel y Jean Cocteau, en una conferencia impartida por la poeta y antóloga Noni Benegas. Hay un antes y un después de Chanel en la moda, y un antes y un después de Cocteau en el cine. Ella liberó a las mujeres al darles libertad de movimientos con ropa de punto para salir a la calle. Él creó los efectos especiales del futuro.
Encarnaron las vanguardias de comienzos de siglo XX en París, y su pervivencia tras la posguerra. Compartieron invención, fantasía y capacidad de trabajo. Ella fue su mecenas y le financió aventuras artísticas y personales. Él fue su amigo fiel y portavoz de su talento ante el mundo. Ambos supieron renovarse y sorprender hasta el final.
➡️ El 13 de febrero, la escultora y doctora en Bellas Artes Pilar V. de Foronda dirigirá la conferencia ‘Camille Claudel y Auguste Rodin. Una relación infinita’. En la Europa de las revoluciones, las biografías de Camille Claudel y Auguste Rodin destacan como individualidades extraordinarias. Las colaboraciones que llevaron a cabo a lo largo de 10 años de vida en común se confunden con sus vidas personales y con los trabajos propios, configurando la obra escultórica más excepcional de final del siglo XIX y principios del siglo XX. A Rodin le acompañaron el éxito de crítica, económico y social. Camille Claudel sobrevivió los últimos 30 años de su vida en un manicomio con un diagnóstico de delirios de grandeza y paranoia.
➡️ El 20 de febrero, la directora y guionista de cine y televisión Inés París Souza cerrará el ciclo con una conferencia sobre Alma Reville y Alfred Hitchcock, considerado como uno de los mejores directores de cine del mundo. Su obra goza de una enorme popularidad y hasta su rostro es reconocido internacionalmente. Pero lo que poca gente sabe es que Hitchcock tuvo una colaboradora fundamental desde los inicios de su carrera: su esposa, Alma Reville, con la que se casó en 1926 y que estuvo a su lado hasta el último momento.
Alma era guionista y editora. A ella se le atribuye el famosísimo montaje de la secuencia de la ducha en la película Psycho (Psicosis, 1960), tras una ardua discusión con su marido, que no quería que la secuencia tuviera música. Con su nombre de soltera, Alma Reville, firmó los créditos de 16 películas de Alfred Hitchcock.